Cascada de Dudhsagar: el corazón de GOA

GOA es el estado más pequeño de la India, pero alberga algunos de los complejos turísticos más famosos del país. Amplias playas, variedad de restaurantes, hoteles para todos los gustos y bolsillos, selva salvaje... todo esto se puede encontrar cuando se visita el GOA.

Una de las principales atracciones de GOA es la cascada de Dudhsagar. Esta cascada es increíble. Tiene más de 600 kilómetros de longitud. La belleza paisajística del lugar viene dada por la cascada escalonada y la increíble vegetación que la rodea.

El nombre de la cascada se traduce como "océano de leche". La cascada debe su inusual nombre a los ríos de agua espumosa. Las corrientes de espuma se forman cuando el agua golpea las rocas, haciendo que el agua parezca tener un tono blanco. Pero también hay una hermosa leyenda sobre el nombre de la cascada: una joven princesa se bañaba en la cascada, pero de repente apareció un príncipe y, para ocultar su desnudez, la bella vertió leche en el agua, que la enturbió.

Es más fácil llegar a las cataratas en jeep, pero no se puede prescindir de una caminata hasta las cataratas mismas. La carretera serpentea por algunas de las zonas protegidas más bellas del GOA y, de camino a las cataratas, se puede disfrutar al máximo de la flora y la fauna de la zona. Tradicionalmente, todas las excursiones a las cataratas de Dudhsagar se detienen también en el histórico templo Mahadev. Este templo se construyó en el siglo XII y es el único ejemplo de arquitectura de templo preportuguesa.

Durante el paseo, podrá dar de comer a los divertidos monos. Están encantados de esperar a los turistas con una golosina. Pero no sólo los monos esperan un capricho; también se puede dar de comer con la mano a los peces que viven en el lago al pie de la cascada.

El paraje de las cataratas de Dudhsagar es uno de los más pintorescos de la India. Su belleza es hipnotizante. No sólo se puede admirar la naturaleza, sino también la ingeniosa construcción humana: el ferrocarril a través de la cascada. Y si tiene suerte, incluso verá pasar un tren por en medio de las cataratas de Dudhsagar.

Casi ningún turista se niega a darse un baño en las cristalinas aguas de Dudhsagar. Un baño con hidromasaje natural le aliviará el cansancio y le revitalizará.

La mejor época para visitar las cataratas es en noviembre, cuando el calor y las lluvias monzónicas se alivian y se puede disfrutar al máximo de la belleza del lugar.